Primitivo Fernández, director de ANIERAC, ha participado en el tercero de los foros organizados en octubre por UPA-Jaén para analizar la situación del mercado del aceite de oliva en Andalucía, junto a Agustín Rodríguez, secretario general de UPA-Andalucía, Manuel Parras, rector de la Universidad, y Juan Gadeo, presidente de Oleocampo y vicepresidente de Interóleo Picual Jaén. En esta ocasión se ha debatido sobre «Comercialización con estructuras de mercado».
El primero, en el que participó el presidente de ANIERAC Pedro Rubio, estuvo dedicado a «Concentración de la oferta de aceite de oliva como respuesta del sector a la crisis de precios» y el segundo a «Calidad como criterio esencial de promoción».
Los ponentes han expuesto diferentes estrategias para luchar en igualdad de condiciones con la gran distribución y conseguir un precio del aceite de oliva que garantice la rentabilidad a todos los actores de la cadena de producción, coincidiendo todos ellos en el daño que produce el que el aceite de oliva se use como producto reclamo en las grandes superficies.
En palabras del director de ANIERAC «Este es un sector complejo, con muchos actores, y hay que pensar en el equilibrio entre todos, para el que no hay una solución única. Por eso todos tenemos que hacer un esfuerzo pequeño en cada uno de los tramos en los que podemos operar. Son soluciones en todos los aspectos. El trabajo pendiente es mejorar los márgenes, desde el olivarero, hasta el consumidor. Este es un sector capaz, que ha mejorado en las técnicas de producción y ha demostrado que sabe hacerlo muy bien y vender todo el aceite que se produce, pero no lo hace con un beneficio suficiente. Sólo hace falta escuchar a los agricultores y a los industriales en los dos últimos años. Nosotros nos quejamos de márgenes, ellos de precios». Para Primitivo Fernández el nivel de precios ideal «es aquel que dejando satisfecho al agricultor permita mantener al consumidor. Los industriales y la producción somos el mismo equipo, por lo que el uso por parte de la gran distribución del aceite de oliva como producto reclamo nos perjudica a todos».
La opinión del secretario general de UPA-Andalucía es que «Debemos conseguir valorizar el precio del aceite para tener rentabilidad. Debemos poner en marcha estrategias con las que combatir con eficacia las prácticas desleales. Las marcas blancas, como producto reclamo y vendiendo a pérdidas, son un enemigo común. El objetivo de las jornadas es poner encima de la mesa las estrategias que hay, como la concentración de la oferta, para poder luchar en igualdad de condiciones con la gran distribución y poder influir en la conformación de los precios del aceite. Los productores no podemos aguantar mucho más con estos precios, pero me consta que la industria envasadora también tiene muchas dificultades para competir con la marca blanca, que se ha instalado con políticas desleales que debemos combatir».
El rector de la Universidad ha comentado que «Éste es un sector de futuro si somos capaces de saber vender. Una diferencia de nuestro país con otros es el gran peso de la distribución y de sus marcas, que están banalizando el producto, están desposicionando el producto. Lo ideal sería que fuéramos capaces de llegar a acuerdos entre los distintos agentes de la cadena para llegar con un precio justo al consumidor. Pero como parece que es muy difícil, lo que ocurre es que cada elemento ocupa lugares de otro en la cadena. Y en este escenario, los productores tienen que buscar plataformas de comercialización y profesionalización que reequilibren el valor del producto».
El presidente de Oleocampo y vicepresidente de Interóleo Picual Jaén ha señalado que «Hay que abordar muchas tareas y una de ellas es difundir la integración del sector por parte de los productores. Hay un desequilibrio muy evidente entre la parte que compra y la que vende y no puede haber acuerdos decentes para las dos partes. El problema es que la cadena se ha roto por la parte más débil, porque el resto de la cadena habla de márgenes y nosotros hablamos de precios y de producción. Nuestro problema es distinto y de rentabilidad y tenemos que trabajar en cambiar un poco la mentalidad. Lo importante no es batir récord de ventas, sino unos precios razonables y decentes».
12 de noviembre de 2010